A principios de los años 90 comenzaron a aparecer los primeros buscadores, hasta que Google nace en el año 1996 desatando el “boom de las páginas web”. La posibilidad de generar dinero a través de ellas, llevó a la necesidad de atraer más tráfico y alcanzar las primeras posiciones en estas plataformas…había nacido el SEO, o por sus siglas en inglés, Search Engine Optimization.
El SEO se centra en los resultados de búsqueda orgánicos, es decir, aquellos que no son de pago.
¿Qué es SEO?
El Search Engine Optimization es el proceso de mejorar de manera orgánica la visibilidad de tu sitio web en los resultados de los distintos motores de búsqueda que existen (Google, Yahoo, Bing, entre otros).
Es una de las herramientas del marketing digital que más ha cambiado durante la última década, y que, actualmente sigue en constante transformación dada la naturaleza de los elementos que la componen. Pese a tener miles de factores en los que un motor de búsqueda se centra para posicionar una página, podemos establecer dos factores básicos:
- Autoridad: Factor basado en la propia experiencia del usuario en un sitio web y que tiene relación directa con la popularidad de este. Se basa en la regla de que entre más se comparte un contenido, más útil es para los usuarios.
- Relevancia: Corresponde a la relación que tiene un sitio web frente a una búsqueda realizada. Está determinado por cientos de factores On-site (dentro del sitio)
¿Qué tipos de SEO existen?
- On-Site: Determinado por la relevancia de la página web. Este posicionamiento se ocupa de asegurar que la web esté optimizada para que el buscador entienda el contenido de la misma. Podemos incluir en este tipo de optimización la selección de palabras clave estratégicas (Keywords), tiempo de carga de la página, experiencia del usuario, formatos de las URLs y la optimización del código.
- Off-Site: Centrado en factores externos a la página web. Dentro de esta, los elementos más importantes son la cantidad y calidad de enlaces que llevan a esta, menciones en medios o otras webs, presencia en redes sociales, el CTR (porcentaje de clics) de nuestra web y autoridad de la marca.
De seguro estás encontrando todo esto muy interesante, pero quieres saber por qué necesitas de una buena estrategia SEO para tu web y los beneficios que esta puede traerte.
¿Por qué el SEO es tan importante para tu negocio?
La principal razón es hacer más útil tu página web tanto para usuarios como para los motores de búsqueda, los cuales, pese a ser máquinas, necesitan entender sobre qué trata cada página de tu sitio y si es útil o no para los usuarios.
El SEO es la mejor forma para que tu público objetivo te encuentre a través de búsquedas en las que tu sitio web es relevante. Estos usuarios están buscando los productos o servicios que tu ofreces y puedes llegar a ellos a través de los motores de búsqueda.
Consejos para un buen posicionamiento
Porque sabemos lo importante que es para ti y tu negocio el tener una mayor visibilidad en el entorno digital, te dejamos algunos consejos que de seguro te ayudarán a subir en posiciones en los motores de búsqueda.
- Selecciona keywords estratégicas para tu negocio: Ayúdate de herramientas para encontrar las tendencias de búsqueda que atraigan más tráfico hacia tu web: Google Trends, SEMrush, Ahrefs, entre otras. ¡Intenta buscar contenido específico relacionado a tu negocio para tener una mayor visibilidad!
- ¡Cuidas tus URL!: No dejes que las direcciones de tu web salgan por defecto. Estas deben ser cortas, descriptivas e incluir keywords.
- Nombra las imágenes: Escribe un Alt, un nombre descriptivo con más de tres palabras y que incluya la keyword principal.
- Utiliza Plugins que ayuden al SEO: Respalda tu escritura con una herramienta que te ayude a optimizar las descripciones de tu post.
- No copies contenido: Los buscadores penalizan los contenidos duplicados de otros sitios web.
- Comparte tu contenido en redes sociales: Encuentra las plataformas donde se mueve tu público objetivo y conecta con tu target para atraer más tráfico.